La tetera se halló hacia el costado oriental de la línea de base, a 13.5 metros desde el punto 0 (datum), con un offset (desplazamiento perpendicular desde la línea base hacia la tetera) de 2.26 metros. La tetera que se localizó en la superficie del sitio, se encontró ligeramente incrustada en la arena con gran parte de ella sobresaliendo. Adicionalmente, se encontró cubierta por algas marinas. El crecimiento de los corales sobre la tetera fue poco o nulo y solo con algo de concreciones. Parece haber sido aplastado en algún momento, ya que está fuertemente abollado en un de sus lados. Se localizó la tetera en el plano del sitio utilizando la trilateración (triangulación) y el offset a partir de la línea base llevado a cabo por Jason Raupp y Tyler Ball. A continuación, fue dibujado in situ por Tyler Ball.
El equipo de buzos que fue dispuesto para recuperar la tetera llevó consigo una canasta de plástico y una superficie lisa y plana en forma de una pizarra de buceo para poder retirar la tetera de manera segura. La tetera se deslizó sobre la pizarra y luego se acomodó dentro de la canasta, este proceso de recuperación fue realizado por Kevin Rodríguez y Anderson Rodríguez. Una vez la tetera se colocó de manera segura en la canasta, los buzos nadaron hacia la superficie, donde los esperaba un bote con un recipiente lleno de agua de mar lo suficientemente grande para situar allí la tetera. Una vez, la tetera fue llevada a la sede de campo en La Caracola, en Puerto Viejo, se retiró del agua para ser registrada digitalmente. Sean Cox y Nathan Richards tomaron una serie de fotos utilizando un fondo de color verde (tela) para poder realizar la fotogrametría, la cual iniciaría luego Nathan Richards, mientras Kristina Fricker se dedicaría a realizar la ilustración de la tetera.
Las dimensiones de la tetera son las siguientes: 88cm para la circumferencia de la base; 16 cm para la altura aproximada del cuerpo; entre 0.2 y 0.3 cm para el grosor del cuerpo de la tetera y 13.5 cm para la altura del pico.
Otro de los procedimientos que se llevó a cabo, para obtener más información acerca de la tetera, fue la toma de rayos X en la clínica veterinaria local. En principio se hizo con la expectativa de que se pudiera llegar a encontrar algo dentro de la tetera; no obstante, los rayos X no revelaron ninguna información adicional además de no enseñar nada en su interior.
El siguiente paso en el proceso de investigación será determinar el material del que está hecho la tetera. Esto será de gran utilidad para lograr la datación relativa del artefacto, al tener presente que a través del tiempo se dio un cambio en el tipo de material utilizado en la elaboración de los utensilios de cocina, como de estaño o de peltre a aluminio. Si la tetera llegase a ser de aluminio, se descartaría la posibilidad de que hubiese hecho parte del menaje de alguno de los naufragios Quartus Fredericus o Christianus Quinto. Lo anterior se podría deducir, ya que el aluminio se empezó a utilizar para la manufactura de objetos de uso cotidiano sólo hasta la segunda mitad del siglo XIX. “La primera vez que se extrajo de manera pura un metal a partir de un mineral, fue en 1825 por el químico danés Hans-Christian. Hacia 1889 aparecerían las técnicas para la producción de aluminio de modo económico” (Historia de aluminio 2016). El estaño o el peltre, por el contrario, se ha producido desde la década de 1630, utilizada sobre todo por los Crooked Lane Wares of London. (Hojalatería 2007).
Stanley B. Alpern (1995) enumera a las teteras y calderos como bienes de intercambio que fueron utilizados a menudo en el comercio de esclavos. Una … “mercancía que se convirtió en una característica Holandesa e Inglesa, elaborada de cobre, latón o estaño. Algunos tenían tapas, algunos mangos. Otros, llamados band-kettles , tenían argollas reforzadas con alambre o una tira de hierro o de cobre “(Alpern 1995). Dado que la tetera se halló en el sitio de un presunto naufragio de un barco de esclavos, es posible que, si la tetera resulta ser de estaño o de peltre, podría haber sido parte de las mercancías del tráfico de esclavos.
Sin embargo, de llegar a ser de aluminio la tetera, también hay una serie de razones por las que podría haberse hallado en el área de estudio. El sitio actual de la ciudad de Cahuita no fue el lugar original de la primera población de dicha ciudad. Ésta originalmente se localizó en un área adyacente al lugar del naufragio de ladrillo. Allí permaneció hasta 1915, cuando el presidente de Costa Rica, don Alfredo González, en agradecimiento a los aldeanos por haberlo rescatado de un naufragio en Tuba Creek (Caribe Way), compró los terrenos para la reubicación de la ciudad al lugar donde se encuentra actualmente. Ahora bien, como la tetera se halló cerca de la ubicación original de la ciudad, algunas de las posibles explicaciones para su existencia en el sitio, podría haber sido que se utilizó como un ancla artesanal de pesca o podría ser parte de los desechos marinos de las actividades de transporte en la zona.
Adicionalmente, una tetera fue encontrada, por el programa de arqueología marítima LAMP (Lighthouse Maritime Archaeology Program), en el sitio de del naufragio Storm en 2012. Esta tetera fue fundida en hierro y probablemente se destinó sobre todo para hervir y verter el agua. La tetera tenía forma redonda, en comparación con tipos posteriores que tenían los hombros, en general, más altos. Al igual que la tetera recuperada en el sitio de Cahuita, los arqueólogos de LAMP no están seguros de si la tetera pudo haber sido parte del menaje de cocina del barco o como parte de la carga.
Esta tetera presenta varios interrogantes interesantes. ¿De dónde vino? ¿Cómo llegó al sitio de estudio? De que esta hecha? Los resultados de los análisis XRF nos dirán mucho más sobre la tetera y su potencial como un artefacto que pudo hacer parte de los naufragios de esclavos.